Para reducir el riesgo del acreedor y, por lo tanto, obtener financiamiento de manera más fácil y rentable, un prestatario puede celebrar una acuerdo colateral en conexión con un Contrato de prestamo.
Según este acuerdo, el prestatario acepta que un activo en particular (o grupo de activos) se venderá y los ingresos se aplicarán al saldo del préstamo en caso de que no se pueda pagar el monto adeudado.
En la práctica, los acuerdos de garantía se divulgan identificando no solo qué pasivos están garantizados, sino también qué activos están pignorados como garantía.
Este tratamiento permite que un acreedor sin garantía real o potencial evalúe lo que otros prestamistas pueden haber concluido sobre la solvencia del prestatario.
También proporciona información sobre la probabilidad de cobrar la deuda en caso de que el prestatario se declare insolvente.
Ejemplo
El balance general de la empresa muestra los siguientes elementos:
En otros casos, el prestatario puede aceptar restricciones sobre algunas de sus actividades con el fin de brindar un mayor grado de seguridad al prestamista de que su posición financiera se mantendrá sólida.
El acuerdo puede cubrir aspectos como el mantenimiento de un monto mínimo de capital de trabajo y limitaciones a los dividendos, préstamos y la readquisición de las acciones de la empresa a sus accionistas.
Dado que los términos de estos acuerdos pueden afectar las perspectivas de flujos de efectivo futuros para los inversores y acreedores, se debe proporcionar información completa.
Esto es especialmente importante cuando parece probable que las limitaciones impidan que la administración actúe como lo ha hecho en el pasado.