¿Qué son los días de efectivo en mano?

Los días de efectivo en caja son el número de días que una organización puede seguir pagando sus gastos de funcionamiento, dada la cantidad de efectivo disponible. Los directivos deben conocer los días de efectivo en caja en las siguientes circunstancias:

Cuando un negocio está empezando, y todavía no está generando ningún dinero en efectivo de las ventas.

Durante la parte baja de un ciclo de ventas de temporada, cuando puede no haber ventas.

Durante la transición a una nueva línea de productos, cuando las ventas de la antigua línea de productos son pobres y están disminuyendo.

Una suposición clave para determinar los días de efectivo en mano es que no hay flujo de efectivo de las ventas; en cambio, sólo hay gastos de operación, como salarios, alquiler y servicios públicos. Para determinar el monto de estos gastos de explotación, utilice el subtotal de gastos de explotación de la cuenta de resultados y reste todos los gastos no monetarios (normalmente la depreciación y la amortización). Luego divídalo por 365 para determinar el monto de la salida de efectivo por día. Por último, divida la salida de efectivo por día en la cantidad total de efectivo disponible. La fórmula es:

Efectivo en caja ÷ ((Gastos operativos – Gastos no monetarios) ÷ 365)

Por ejemplo, una empresa nueva tiene 200.000 euros en efectivo a mano. Sus gastos operativos anuales son de 800.000 euros, y hay 40.000 euros de depreciación. Su cálculo de efectivo en mano es:

200,000 ÷ ((800,000 Gastos operativos – 40,000 de depreciación) ÷ 365 días)

= 96 días de efectivo en mano

Hay varios problemas con esta medición. En primer lugar, se basa en un promedio de salida de efectivo diario, que no es realmente el caso. En cambio, el dinero en efectivo tiende a ser gastado de manera grupal, como cuando se paga el alquiler o la nómina. Además, la dirección tiende a tomar medidas drásticas para reducir los gastos a medida que disminuyen las reservas de efectivo, de modo que los días reales de funcionamiento tienden a ser más largos de lo que indica esta relación. Por lo tanto, es mejor utilizar un análisis detallado de la corriente de efectivo para determinar la duración precisa del efectivo disponible, con actualizaciones periódicas.

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